Aquí podéis escuchar un avance del nuevo disco ("Los peces de colores": Te debo un baile). Sin duda son unas de las pocas bandas que nunca nos defraudan y que siempre tendrán algo que decirnos.
"Cuesta encontrar un grupo con una vinculación tan íntima con su audiencia y, especialmente, con su ciudad. A muchos, si nos preguntaran cuál es el grupo más autóctono, más arraigado a Barcelona, diríamos Nueva Vulcano. Un verdadero fenómeno de culto que se ha convertido en el grupo de muchos. No solamente el grupo favorito de muchos, sino el grupo que representa a muchos. A veces, cierta poesía más o menos críptica, acompañada de música visceral y sin concesiones, cala tan hondo entre sus seguidores que la admiración por una banda se convierte en un culto; en el ritual de ir a absolutamente todos sus conciertos, en el ritual de coleccionar cada single o cada álbum que se edite de ellos.
Todo esto es lo que Nueva Vulcano son hoy día: un grupo especial. Ahora nos presentan su tercer disco de estudio, "Los Peces de Colores" (BCore, 09), después de su debut "Principal Primera" (BCore, 04) y de su impresionante "Juego Entrópico" (BCore, 05), que les ha mantenido en los escenarios durante 4 años, exceptuando pequeños episodios discográficos como el EP compartido con los norteamericanos The Life And Times, que les llevó de gira por los EEUU, y el single "Los días señalados" (BCore, 07), más referencias para la lista de singles que llevan editando en paralelo a sus álbumes. Su fiel aliado, Santi Garcia, quien para este disco les ha hecho levantar el tono de voz y hacer que Artur Estrada cante más alto y claro que nunca, para que sus increïbles letras salgan a relucir como debe ser; maravillas de la lírica como "Níquel, Canela", una de las letras más preciosas escritas jamás por Artur, de una sencillez y belleza conmovedoras. O evocadoras como "Dulce y ácida" y "África", divertidas como "Jen Trok, logopeda", oscuras como "La maleza", o de una proximidad casi sociológica en "La ley de costas". Letras propias de alguien que, simplemente, no sabe imitar a los demás y tiene que inventarse su propio lenguaje. Como siempre, esa guitarra sucia y a veces tímida, esos arreglos de bajo monumentales salidos del genio compositor de Wences Aparicio y esa batería poseída por el diablo de Albert Guàrdia, que en este disco ha grabado las pistas de su instrumento en los estudios Garate Studios de Andoain, conforman un conjunto de una sonoridad inconfundible y que hace que toda la poesía, ya sea lírica, estética, musical o conceptual de Nueva Vulcano brille con más luz que nunca. (extraído de www.bcoredisc.com)"
(Santi)
